lunes, 13 de marzo de 2017

NO TENGAMOS MIEDO A SER SANTOS

“En el «Credo», después de profesar que la Iglesia es «una», también decimos que es «santa». ¿Cómo es posible afirmar que la Iglesia es santa si a lo largo de su historia ha tenido tantos momentos de oscuridad? ¿Cómo puede ser santa si está compuesta de hombres pecadores? La Iglesia es santa porque Dios es Santo, es fiel y no la abandona nunca al poder de la muerte y del mal; es santa porque Jesucristo, el Santo de Dios, se ha unido a ella indisolublemente; es santa porque el Espíritu Santo la purifica, la transforma y la renueva constantemente; es santa, no por nuestros méritos, sino porque Dios la hace santa. No tengamos miedo a ser santos. Todos estamos llamados a la santidad, que no consiste en hacer cosas extraordinarias, sino en dejar que Dios obre en nuestras vidas con su Espíritu, en confiar en su acción que nos lleva a vivir en la caridad, a realizar todo con alegría y humildad, para mayor gloria de Dios y bien del prójimo”. PAPA FRANCISCO

viernes, 20 de septiembre de 2013

EDUCAR CON EXITO, LOS PADRES ANTE LA ESCUELA


Si la obligación principal de los padres es la de educar y formar a sus hijos, es irresponsables pensar que llevándolos  a un buen colegio (público o privado) su formación es delegada a la institución, evadiendo así su responsabilidad, o si se les envía a un colegio religioso, delega la responsabilidad de la formación moral y religiosa. Es un grave error,  ya que educación sobretodo sus bases y principios es una tarea indelegable de los padres, salvo algunas excepciones.

Nunca pueden olvidar que la institución educativa ejerce primordialmente una labor académica y colabora con los padres en la tarea de formación, pero no puede sustituir a los padres que son los educadores y tienen esta responsabilidad por haber decidido traer los hijos al mundo.

 Como no deben permanecer pasivos ante esta responsabilidad frente a la institución educativa, deben cumplir estas tareas:
  1. Control, no debe abarcar solo el aspecto académico, como revisar tareas y ver si cumple con su trabajo y normas en clase, debe ir un poco más allá, enseñar hábitos de orden, trabajo, limpieza, etc., cualidades que perciben en la manera de hacer sus trabajos, llevar sus cuadernos, contestar sus exámenes.
  2.  Inspección, los padres están obligados a conocer que es lo que se enseña y sus escuelas y cuáles son los delineamientos de la escuela sobre aspectos formativos, conocer a sus maestros y compañeros, inclusive el personal que labora en la institución.

Es muy importante, que los padres conozcan a los docentes en cuanto a su moralidad y principios, estos se manifestaran en los lineamientos, orientaciones y forma de expresarse en el aula con los alumnos.
Si requiere y es el caso, los padres deben conversar con los directivos del plantel para que observen a sus docentes y corrijan las fallas o deficiencias que hubiere, así como también resaltar la buena labor de estos, que es el denominador común.
También, con delicadeza indicar al maestro algún punto de carácter particular referente a su hijo e inclusive del grupo en general, elementos que puedan ser de provecho al docente para mejorar la calidad de la formación y también la relación entre ellos.
La sinceridad sin rodeos, ir al grano, sin ofender, haciendo corrección fraterna, decir que existen deficiencias en el trato hacia los alumnos, cuando se aleja de la educación moral y humanista que deben recibir nuestros hijos.
Muchas veces, hacer sugerencias que puedan mejorar las actividades de la institución en general, o del aula en particular. Seguramente que la dirección del plantel escuchará y agradecerá cualquier indicación que vaya en beneficio de la institución o del alumno.
La comunicación no debe faltar entre padres y maestros. No es solo para conocerse; debe dirigir en ambas direcciones, el interés por el comportamiento del alumno y del grupo, y su rendimiento y comportamiento escolar.

No cabe duda que el trabajo de la educación es en equipo, y este interés que demuestres ante la institución ayudara a que tu hijo se forme mejor.

Ing. Vincenzo Fusco Sparacino  (Papá y Esposo)
PALABRAS CLAVES: EDUCAR, PADRES, FAMILIA, NÚCLEO, EDUCADOR, HIJO, JOVEN, ENSEÑANZA, EJEMPLO, BIEN, ATRACCION, GRACIA, MORA

miércoles, 18 de septiembre de 2013

EDUCAR LOS SENTIMIENTOS PARA EL BIEN

ATRAER BUENOS PENSAMIENTOS
Existen momentos en que hacer el bien no resulta muy agradable...

Es por esto, por esos momentos y ocasiones que nos tientan a dejar de obrar bien, cuando hay que procurar educar los sentimientos de nuestros hijos y alumnos, para que ayuden lo más posible a la vida moral. Por ejemplo, si una persona siente incomodidad al mentir, y agrado cuando es sincero, eso será una gran ayuda en su vida moral. Igual que si se siente molesto cuando es desleal, egoísta, perezoso, envidioso, injusto, porque todo eso le alejará de esos errores, y a veces con bastante más fuerza que muchos otros argumentos. Actuaríamos con inteligencia y comprendemos la importancia de educar sabiendo mostrar con el ejemplo lo atractivo de la virtud y el bien.

Cuán importante es este concepto, ya que, si logramos formar un pensamiento atractivo de las virtudes que deseamos fomentar, y procurar tener bien presentes esos buenos pensamientos, es mucho más fácil que llegue a POSEER esas virtudes. Logrará, además, que ese camino sea menos penoso y más satisfactorio. Por el contrario, si piensa habitualmente en el atractivo de los vicios que desea librarse (un atractivo ruin, que siempre existe, del cual no debemos ignorar su fortaleza), lo más probable es que el evidente encanto que siempre tienen esos errores le haga más difícil deslastrarse de ellos.

Me inclino con mucha fuerza en profundizar en el atractivo del bien, representarlo en nuestro interior como algo atractivo, esperanzador, alegre y motivador, es más importante de lo que parece. Muchas veces, los procesos de mejora se dañan simplemente porque el concepto o la figura de lo que uno ha planificado no llega a ser lo bastante motivador o deseable.


Y esto no quiere decir que con una óptima educación de los sentimientos, sería muy fácil llevar una vida ejemplar. Estamos claros que si hacemos el hábito costará menos. Pero, de todas formas, por muy buena que sea la educación de nuestros hijos o alumnos, hacer el bien en estos momentos, donde lo malo se disfraza de bueno, y la falsedad de sinceridad, le supondrá con frecuencia  tomar decisiones, y a veces grande, que dependerán de la claridad con la que se les haya sembrado la imagen de la virtud y el bien. Porque esa persona sabe muy bien que siempre sale ganando con el buen obrar, producto de la atracción al bien.

Ing. Vincenzo Fusco Sparacino  (Papá y Esposo)
PALABRAS CLAVES: EDUCAR, PADRES, FAMILIA, NÚCLEO, EDUCADOR, HIJO, JOVEN, ENSEÑANZA, EJEMPLO, BIEN, ATRACCION, GRACIA, MORAL

lunes, 16 de septiembre de 2013

QUE SEAN BUENA PERSONA (sentimientos y moral)

¿Qué relación hay entre educación de los sentimientos y educación moral?, con un ejemplo que seguramente hemos vivido de cerca. Un pequeño de unos  diez años, y sus maestros se expresan de esta manera de el: "Es un niño excelente, una persona de mucho talento, etc., es una lástima que no tenga buen corazón. Le gusta meter a sus compañeros en problemas, y después zafarse escurriendo la responsabilidad al otro, también distrae a los demás. Es muy al extremo egoísta, aunque, como es listo, lo sabe disimular.
Saca unas notas muy buenas, y tiene grandes cualidades para casi todo. Lo malo es que parece disfrutar humillando a los que son más débiles o menos “inteligentes”, y se muestra insensible ante su sufrimiento. Y no pienses que le tengo aversión. A pesar de que es el más brillante de la clase, no es una buena persona. Me impresiona su inteligencia, pero me aterra su corazón."

Cuando observamos casos como el de este niño, comprendemos enseguida que debemos prestar verdadera atención a la educación moral. Y que una buena educación sentimental ha de ayudar, entre otras cosas, a aprender a disfrutar haciendo el bien y sentir disgusto haciendo el mal.


TU DECIDES ALEGRE O TRISTE 
Y lo podemos poner en práctica, enseñándoles a nuestros hijos y alumnos, que en nuestro interior siempre existen sentimientos buenos que nos estimulan a hacer el bien, y, junto a ellos, revolotean también otros que son como virus infecciosos que amenazan permanentemente nuestra buena vida moral. Por eso debemos esculpir y crear sentimientos para que los ayuden lo más posible a sentirse bien con aquello que nos ayuda a construir una vida personal armónica, plena, lograda, alegre, exitosa. Y a sentirse mal en caso contrario. 


Ing. Vincenzo Fusco Sparacino  (Papá y Esposo)
PALABRAS CLAVES: EDUCAR, PADRES, FAMILIA, NÚCLEO, EDUCADOR, HIJO, JOVEN, ENSEÑANZA, EJEMPLO, SENTIMIENTO, EMOCIÓN, INTELIGENCIA, MORAL